Dicen que la amistad no tiene límites, ya sea de forma, tamaño o especie, escribe reinostv.
El elefante Jotto y el avestruz Pea son un ejemplo perfecto de ello. Se conocieron después de que Jotto fuera separado de su manada cuando sólo tenía un mes de edad.
Fue llevado a un orfanato de elefantes en Kenia por el David Sheldrick Wildlife Trust (DSWT), donde pudo curarse hasta que estuvo listo para volver a la naturaleza.
No sabían que Jotto se haría muy amigo de Pea, el avestruz.
Pea había sido rescatado unos años antes, cuando el personal del orfanato salió a rescatar a una cría de elefante y vio que el pobre pájaro y su hermano Pod necesitaban ayuda.
Así que los llevaron de vuelta al refugio de elefantes. Al cabo de un tiempo, Pod volvió a la selva, pero Pea decidió quedarse con los elefantes.
«Es seguro decir que Pea, la huérfana de avestruz, cree definitivamente que forma parte de la manada de elefantes y el pequeño Jotto está más que feliz de disfrutar de un abrazo con su amigo emplumado.»
«Momentos hermosos y tiernos en la guardería de Nairobi, donde estos dos huérfanos y muchos, muchos otros tienen la oportunidad de curarse y, cuando estén listos, volver a la naturaleza.»
Esta historia apareció originalmente en Kingdomstv.com
