Una mujer conducía por una apartada carretera comarcal cuando vio algo que se movía entre la espinosa vegetación del arcén. Investigó más a fondo y pronto vio a un perro herido que cojeaba entre los densos arbustos. El perro, herido y solitario, se alegró tanto de verla que saltó por encima de la vegetación y se echó en brazos de la mujer a pesar de sus atroces heridas.
El perro, al que más tarde llamaron Vlad, tenía un aspecto extrañamente demacrado y estaba desesperado por recibir ayuda. Sabía que la mujer era su única posibilidad de sobrevivir, así que la besó y saltó a su coche con nuevas esperanzas. El pobre estaba tan hambriento que intentó devorar un paquete de pañuelos en el coche, escribe ilovemydog.
Vlad fue acogido por el grupo de rescate «Howl Of A Dog». Su evaluación veterinaria inicial determinó que tenía fracturas en ambas patas, probablemente debidas a un atropello. Las lesiones habían empeorado porque tenían al menos una semana, lo que significaba que Vlad había estado ahí fuera, hambriento y sufriendo solo durante mucho tiempo.
Vlad tuvo que ser operado de urgencia para solucionar los problemas de sus extremidades. Su rehabilitación fue difícil, pero los trabajadores del refugio le animaron y le dieron fuerzas para seguir luchando contra el dolor y las molestias hasta que se curó. Con más ejercicio, recuperó todas las funciones de su pata lesionada y se convirtió en un chico brillante y guapo.
Vlad ha encontrado el hogar de sus sueños con una familia de Phoenix, Arizona, y vive como un príncipe Su nuevo papá, Curt, lo ha rebautizado como «Buddy», una combinación perfecta para la personalidad amistosa y leal del perrito. Te espera una gran vida, Buddy, ¡y no dejes de sonreír!
Haz clic en el siguiente vídeo para ver el rescate de Vlad, que fue encontrado cojeando y pudriéndose en medio de la nada.
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