Se pueden forjar los vínculos más asombrosos entre niños y animales cuando tienen la oportunidad de interactuar y pasar tiempo juntos. Las mascotas son prueba de ello. A menudo, los niños que crecen con mascotas se vuelven muy cercanos a ellas, y a veces sus mascotas incluso adoptan un papel protector.
Este tipo de cercanía suele verse entre mascotas comúnmente domesticadas y humanos, más que con animales salvajes.
Eso es parte de lo que hace que esta historia sea tan increíble.
Joel es un niño pequeño que ha hecho un amigo muy especial. Vive en las Islas Canarias, en Valle Gran Rey, donde hay muchos pescadores.
Los pescadores son conocidos por arrojar sus capturas al puerto cercano, ¡y esto puede atraer a algunos visitantes muy interesantes!
Joel disfruta interactuando con la vida marina visitante que merodea por el puerto, si le dejan. Uno de sus amigos más intrigantes es una raya gigante.
Es casi increíble que una raya se haga amiga de un niño humano, ¡pero es verdad! El mundo nunca deja de ofrecernos sorpresas asombrosas.
Por suerte para nosotros, alguien captó un día la amistad en acción.
Su interacción te derretirá el corazón. Algunas personas dudarían o incluso tendrían miedo de acariciar una raya, pero Joel no. Parece saber que la criatura gigante no va a hacerle daño.
Los pescadores le dan gambas a Joel para que alimente a la raya gigante. La raya engulle las gambas y parece muy contenta.
Después de comer, la raya deja que su amigo le dé una dulce palmadita y vuelve a nadar mar adentro.
¿Sabías que las rayas son criaturas intrínsecamente mansas? Sólo recurren a sus aguijones si se sienten en una situación de vida o muerte.
Son muy amistosas y la mayoría de la gente no lo sabe.
Tras subirlo a YouTube, el vídeo se hizo viral de inmediato. La improbable amistad de este dúo conmovió a personas de todo el mundo. Comparte este vídeo con otras personas que apreciarán este dulce vínculo entre especies.
Esta historia apareció originalmente en Goodfullness.